El árbol de Neem originario de la India, Pakistan y Birmania es dependiente de clima tropical y subtropical. Fué esparcido también en Asia, de África, América y el continente de Australia y las islas en el Pacífico a través del hombre.
El fruto es peloso, en forma de oliva con nueces, que puede ser ovales a esféricas. Si está madura, es 1,4 a 2,8 cm de largo y de 1 a 1,5 cm de diámetro. La cáscara es fina, la carne amarillenta, blanca, amarga sabor dulce.
El árbol de Neem es conocido por su aguante en zonas de sequía. En áreas con precipitación media anual de 400 a 1200 mm y donde haya aguas subterráneas. El árbol de Neem puede crecer en muchos tipos de suelos, pero prefiere suelos arenosos con un pH de 6,2-7,0. El árbol no tolera el encharcamiento. Temperaturas de 31 ° C a 50 ° C aguanta bien Bajo los 4° sufre y pierde sus hojas.
Ideal para salvar zonas tórridas de la sequía total. Propriedades antibactericidas, antivirales, insecticida, fungicidas, fertilizantes y espermicidas, cualidades que fueron reconocidas por los hindúes desde hace miles de años en la medicina Ayurvédica tratando la anemia, la hipertensión, la hepatitis, úlceras, la lepra, urticaria, trastornos de la tiroides y la indigestión. Contra los piojos, la higiene dental, ayuda contra el diabetes, cáncer, baja el colesterol, tratamiento profiláctico de la malaria.
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