Alena Persaldi, (Autora del Libro "El Jardin de los Recuerdos" (De mis vidas anteriores) Profesional en Ciencias Psicofisicas, Investigadora de Fenomenos Paranormales, Terapeuta en Regresion a Vidas Pasadas y Lectura de Registros Akashicos, Formadora de Lectores de Registros, Canalizadora, dedicada a la Investigacion Cosmica de Fenomenos Extraterrestres.
domingo, 1 de agosto de 2010
Volar juntos, pero no atados
El unico modo de vivir el Amor Pleno y con Felicidad............. Alena
Cuenta una vieja leyenda que, una vez, hasta la tienda del anciano chaman de la tribu llegaron, tomados de la mano, Toro Bravo, el más valiente y honorable de los jóvenes guerreros, y Nube Alta, una de las mas hermosas mujeres de la tribu.
- Nos amamos - empezó el joven
- Y nos vamos a casar - dijo ella.
- Y nos queremos tanto que tenemos miedo.
- Queremos un hechizo, un conjuro, un talismán !
- Algo que nos garantice que podremos estar siempre juntos.
- Por favor - repitieron - ¿Hay algo que podamos hacer?
El viejo los miró emocionado al verlos jóvenes y tan enamorados, esperando su palabra.
- Hay algo... - dijo el anciano después de una larga pausa - pero, no se, es una tarea muy dificil y sacrificada.
- No importa - dijeron los dos.
- Bien - dijo el anciano chaman - Nube Alta, ¿Ves el monte al norte de nuestra aldea? Deberás escalarlo sola y sin más armas que una red y tus manos, deberás cazar al halcón más hermoso y vigoroso del monte. Y tú, Toro Bravo, deberás escalar la montaña del Trueno y encontrar la más bravía de todas las águilas y solamente con tus manos y una red deberás atraparla. Tres días después de la luna llena deberán traer ante mí, vivas, las dos aves. Salgan ahora!
Los jóvenes asintieron, mirándose con ternura y una fugaz sonrisa, partieron a cumplir su misión, ella hacia el norte y él hacia el sur.
El día establecido, los dos jóvenes esperaban con bolsas frente a la tienda del chaman. El anciano les pidió que con mucho cuidado sacaran las aves de las bolsas. Eran verdaderamente las más hermosas de su estirpe.
- Volaban alto? - preguntó el chaman.
- Sí, como lo pediste. ¿Las matamos y bebemos el honor de su sangre? - pregunto el joven.
- No - dijo el anciano.
- ¿Las cocinamos y comemos el valor de su carne? - propuso la joven.
- No - repitió el anciano - hagan lo que les digo. Tomen las aves y atenlas entre sí por las patas con estas tiras de cuero.... Cuando las hayan anudado, suéltenlas y que vuelen libres.
El águila y el halcón intentaron levantar el vuelo pero sin éxito. Solamente consiguieron revolcarse en el suelo y acabaron dándose picotazos entre sí hasta lastimarse.
- Este es el conjuro. Jamás olviden lo que han visto. Son ustedes como un águila y un halcón. Si se atan el uno al otro aunque lo hagan por amor, no sólo vivirán arrastrándose, sino que además, tarde o temprano, empezaran a lastimarse el uno al otro. Si quieren que el amor entre ustedes perdure, vuelen juntos y jamás atados.
LA LEYENDA DE LOS JÓVENES ENAMORADOS
ResponderEliminarCuenta una vieja leyenda que, una vez, hasta la tienda del anciano chaman de la tribu llegaron, tomados de la mano, Toro Bravo, el más valiente y honorable de los jóvenes guerreros, y Nube Alta, una de las mas hermosas mujeres de la tribu.
- Nos amamos - empezó el joven
- Y nos vamos a casar - dijo ella.
- Y nos queremos tanto que tenemos miedo.
- Queremos un hechizo, un conjuro, un talismán !
- Algo que nos garantice que podremos estar siempre juntos.
- Por favor - repitieron - ¿Hay algo que podamos hacer?
El viejo los miró emocionado al verlos jóvenes y tan enamorados, esperando su palabra.
- Hay algo... - dijo el anciano después de una larga pausa - pero, no se, es una tarea muy dificil y sacrificada.
- No importa - dijeron los dos.
- Bien - dijo el anciano chaman - Nube Alta, ¿Ves el monte al norte de nuestra aldea? Deberás escalarlo sola y sin más armas que una red y tus manos, deberás cazar al halcón más hermoso y vigoroso del monte. Y tú, Toro Bravo, deberás escalar la montaña del Trueno y encontrar la más bravía de todas las águilas y solamente con tus manos y una red deberás atraparla. Tres días después de la luna llena deberán traer ante mí, vivas, las dos aves. Salgan ahora!
Los jóvenes asintieron, mirándose con ternura y una fugaz sonrisa, partieron a cumplir su misión, ella hacia el norte y él hacia el sur.
El día establecido, los dos jóvenes esperaban con bolsas frente a la tienda del chaman. El anciano les pidió que con mucho cuidado sacaran las aves de las bolsas. Eran verdaderamente las más hermosas de su estirpe.
- Volaban alto? - preguntó el chaman.
- Sí, como lo pediste. ¿Las matamos y bebemos el honor de su sangre? - pregunto el joven.
- No - dijo el anciano.
- ¿Las cocinamos y comemos el valor de su carne? - propuso la joven.
- No - repitió el anciano - hagan lo que les digo. Tomen las aves y atenlas entre sí por las patas con estas tiras de cuero.... Cuando las hayan anudado, suéltenlas y que vuelen libres.
El águila y el halcón intentaron levantar el vuelo pero sin éxito. Solamente consiguieron revolcarse en el suelo y acabaron dándose picotazos entre sí hasta lastimarse.
- Este es el conjuro. Jamás olviden lo que han visto. Son ustedes como un águila y un halcón. Si se atan el uno al otro aunque lo hagan por amor, no sólo vivirán arrastrándose, sino que además, tarde o temprano, empezaran a lastimarse el uno al otro. Si quieren que el amor entre ustedes perdure, vuelen juntos y jamás atados.
Conocia la leyenda Toni, es hermosa y ademas muy pero muy sabia, gracias por tus aportes. Beso grande. Ale
ResponderEliminar