Entrevista realizada por Sebastian Aranguren a Alena Persaldi el dia 28-04-2010 y publicada el 2-05-2010
Increíbles casos de espíritus que se cobran revancha
Vidas pasadas jaquean
a existencias del presente
Por Sebastián Aranguren
Nada es igual para el profesional cincuentón que se animó a bucear en sus vidas pasadas, desde que se enteró que su actual esposa ya había sido su cónyuge a principios del Siglo XIX y que, además, entre ambos existía un potente vínculo espiritual por el cual iban a volver a encontrarse, obviamente sin reconocerse a nivel conciente, en algún otro momento del futuro inmenso.
Ni tampoco para una mujer que terminó reencontrándose con un viejo amor edificado también un siglo antes, aunque ahora lo que es una relación de pareja convencional fue, allá lejano en el tiempo, el vínculo cariñoso y afectivo de una madre con su hija.
Sin embargo, no siempre las referencias directas a la reencarnación se encuadran en hechos felices o románticos como los mencionados: también espíritus torturados u oscuros son capaces de alterar la suerte de una persona que así “paga” en el presente por circunstancias derivadas de una existencia previa del alma.
En estos casos, las técnicas akashicas se convierten en el remedio para afrontar situaciones que no encuentran explicación aparente en la lógica y que lleva a que quienes las padecen se enfrenten con dificultades del más variado tono en la salud, el trabajo o la vida sentimental.
Miles de Vidas
La psíquica Alena Persaldi es una investigadora con amplio conocimiento del tema y que intervino en más de una búsqueda de vidas pasadas, en procura de dar con la causa que perjudicaba a una persona incapaz de hallar respuestas a las problematicas que la afectaban.
En diálogo con Expedientes Secretos, Persaldi aseguró que “todos tenemos vidas pasadas al extremo que quienes han
profundizando sobre estudios akáshicos estiman que cada espíritu puede reencarnar hasta varios miles de veces y esas existencias previas –argumentó- en algún punto terminan influyendo en nuestro presente con episodios que ,a veces, pueden cobrar características dramáticas”.
“Reencarnar es volver a tomar cuerpo y en este caso significa que un espíritu puede cambiar su identidad pero no su esencia”, precisó la investigadora, para quien en todo caso el proceso de volver a anidar en la carne es, para esa alma, “una posibilidad de evolucionar”.
Esa evolución espiritual a la que refiere Persaldi es, por ejemplo, la que la propia investigadora determinó cuando una paciente suya, viuda, la contactó para hacer una revisión de sus vidas pasadas.
El asunto que atribulaba a esa mujer, recordó Persaldi, era que su marido –al igual que ella un profesional que practicaba la religión judía- la ofendía de modo constante haciendo hincapié en su fe, que era precisamente la misma que él profesaba.
La muerte súbita arrebató a los 43 años al marido del lado de su esposa que, sin embargo, quiso saber los motivos de esos desencuentros que tanto la amargaban. La regresión llevó a Persaldi a determinar, a través de la técnica akáshica, que en su vida pasada el hombre en cuestión había sido un militar de alto rango del Tercer Reich.
“Si tomamos el concepto que apunta a la evolución del espíritu a través de la reencarnación –comentó Persaldi- en este caso el del nazi reencarnó precisamente en el de un judío para evolucionar de las barbaridades que había hecho como militar y que eran un manchón. Y un dato más –añadió la investigadora- también su señora que tanto padeció su maltrato en el presente, había sido un espiritu que en la Segunda Guerra Mundial encarno en la fisonomia de una mujer de nacionalidad alemana.
Espíritu al ataque
Pero no siempre las distintas situaciones en el marco de pujas entre vidas anteriores enfrenta almas reencarnadas. También puede un espíritu que no reencarnó todavía “atacar” a otro con el que tuvo una historia previa aunque, en su caso, sí recaló en otro cuerpo humano.
Una mujer de origen caribeño casada con un ciudadano español consultó a Persaldi por una afección a la que los médicos no lograban dar en la tecla: repentinamente quedaba como en estado catatónico, en blanco, sin que nada pudiera justificar semejante manifestación del organismo.
“Intentamos con una regresión a vidas pasadas y nos encontramos con que el espíritu de la mujer que había venido a verme, había estado en el cuerpo de una encargada de un internado de señoritas en un país europeo”, remememoró Persaldi.
“A ese establecimiento, una familia llevó a una de sus hijas adolescentes y la chica – explicó la especialista en fenómenos paranormales- sufrió maltratos por años hasta que murió quien era su madre y su padre, evidentemente liberado de la presión que su esposa ejercía contra su hija, decidió sacar a la adolescente del internado”.
“El espíritu de esa chica que hasta el momento de la regresión no había reencarnado –sostuvo-, ubicó en la mujer caribeña al de la encargada del internado y a quien le hacía pagar –aclaró- por la sucesión de maltratos a la que la había sometido en otra vida”.
Pero había más. El espíritu del ciudadano español, el marido en la actualidad de la mujer afectada que concurrió a la consulta con Persaldi, “era la reencarnación del padre de la joven internada, por lo que el ataque del espíritu de la chica del internado era doblemente virulento”.
“El modo que encontramos para poner fin a la posesión fue revelarle primero a la mujer de la consulta que arrojó su regresion a vidas pasadas y, por el otro lado, sugerirle que le hablara a ese espíritu no reencarnado, pero evidentemente molesto por lo que había sufrido, para pedirle perdón por lo hecho”.
Sólo así terminó el calvario de la mujer que nunca más volvió a experimentar los enigmáticos cuadros que la atormentaban y a los que pudo ponerle punto final cuando enmendó en un diálogo desde el alma los errores del pasado de los que nunca hubiera sido conciente.
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Primer recuadro
Sombra asesina que
arrebataba el sueño
Entre otros casos de regresión a vidas pasadas en los que intervino Alena Persaldi, el de la mujer que no podía conciliar el sueño constituye sin dudas uno de los más atrapantes, por tratarse de un espíritu reencarnado temeroso de padecer el mismo fin sangriento que había tenido en una existencia anterior.
Esa mujer, de 42 años, de repente una noche dejó de dormir. No hubo tratamiento que la llevara a reconciliar el sueño por lo que intentó probar suerte con las habilidades de la psicofísica.
“En la regresión a la vida pasada se podía observar lo que había sucedido con ese espíritu: una mujer dormía de espaldas a la puerta de su habitación. Esta se abre de golpe –relató- y una sombra refleja sobre la pared la acción de una mano humana descargando una puñalada sobre la víctima indefensa”.
“Evidentemente esta era una información que el espíritu atesoraba y que en un momento determinado, cuando se desató la crisis del sueño –consideró Persaldi- la memoria akáshica trajo a colación”. Hoy la mujer de esta historia duerme tranquila y en ella su espíritu también descansa ya sin temores.
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Segundo recuadro
Amores para siempre
que vienen de antes
Dignos de las letras de los boleros cantados por Marco Antonio Solís o del más tierno filme sentimental, son los casos que revelan la existencia de almas gemelas y de parejas que en el plano espiritual hace siglos que están unidas.
Alena Persaldi aseguró a Expedientes Secretos que esos casos existen y por lo tanto “hay parejas que hace siglos que están juntas y se siguen reencontrando en las distintas reencarnaciones en las que atraviesan diversas circunstancias”.
“También se da que puede haber más de un alma gemela de otra vida y que en la actual no logran establecer una relación plenamente correspondida, tal como ocurre –aseveró- con parejas que se vinculan porque en algún modo se reconocen del pasado no conciente, pero el reencuentro por distintas situaciones no puede concretarse”.
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Tercer recuadro
“Todos tenemos atrás
una historia pesada”
No crea el lector que sólo los famosos guardan historias en el closet, tal como se ha dicho últimamente. Nuestras vidas pasadas, al decir de Alena Persaldi, también nos pone de cara a vidas pesadas, densas y oscuras ocultas en los profundo del inconciente.
“Ocurre que todos tenemos vidas pasadas pero como se trata de la evolución del espíritu a través de las distintas reencarnaciones –afirmó la investigadora- también es cierto que para poder ver la luz primero hay que conocer la oscuridad”.
“Por eso es que nuestras vidas anteriores suelen ser en algunos casos bastante pesadas” dijo, pero remarcó que “en todo caso se trata de un aprendizaje y de la evolucion misma del espiritu"que queda conservado en la memoria akashica.
“Esa es la memoria de las vidas anteriores guardadas en el inconciente profundo –puntualizó- y que puede volver al conciente a través de las regresiones de vidas pasadas o de lecturas de referentes akáshicos. En todos los casos- concluyó- son instancias sanadoras frente a problemas respecto a la pareja, el trabajo, la salud y la calidad de vida”.
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Sebastian Aranguren
Expedientes Secretos - Diario Popular
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