El estrés geopático sucede debido al desarrollo de un desequilibrio o enfermedad corporal,como consecuencia de situarse con cierta asiduidad cerca de alguna de las líneas de energías nocivas que aparecen en la tierra.
El estrés geopático ha demostrado ser el factor común de muchas enfermedades graves y leves y de dolencias crónicas así como debilitamiento del sistema inmunitario.
Deficiencias cardiovasculares, trastorno por déficit de atención, trastornos de deficiencia inmune, fatiga crónica, son algunas de las influencias nocivas del estrés geopático. Otros efectos pueden manifestarse en el organismo como dolores crónicos, dolores de cabeza repentinos, signos de envejecimiento físico, irritabilidad, inquietud y trastornos del sueño. En general según la mayor o menor intensidad de las radiaciones, el tiempo de permanencia sobre las mismas, predisposició n de cada persona, puede llegar a verse afectada de: reumatismo, problemas circulatorios, afecciones bronquiales, artrosis, alzheimer, parkinson, úlceras y tumores. En general estas afecciones no tienen explicación médica. También es un factor común en casos de infertilidad y abortos involuntarios, dificultades de aprendizaje, problemas de comportamiento y discapacidad neurológica en los niños.
La respuesta al tratamiento contra el estrés geopático suele ser lenta y en apariencia sin cambios visibles, sin embargo cuando nuestra casa o lugar de trabajo se neutraliza, nuestro cuerpo empieza a sanar y recuperamos la tranquilidad y el estado armonioso original que seguramente ya ni recordábamos.
Los campos electromagnéticos que emanan de estructuras como de alta tensión, de antenas de teléfonos, de televisión por satélite, de postes eléctricos, o de cajas de fusibles son igualmente nocivos.
La principal fuente de desequilibrio geopático son las líneas Hartmann. Estas líneas pueden ser detectadas y neutralizadas. Fueron descubiertas en 1950 por un médico alemán, Ernst Hartmann. Las líneas forman una red alrededor de la tierra, corriendo de norte a sur y de este a oeste, formando una rejilla, y se extienden a una altura de 60 - 600 pies. Según el Dr. Hartmann, el peor lugar que una persona puede dormir o trabajar es en un nudo de 2 líneas Hartmann, es decir, donde dos líneas se cruzan, debido a la radiación que emite ese lugar. Cuando la radiación natural de los campos electromagnéticos que emanan del agua subterránea, las concentraciones de minerales, las fallas y cavidades subterráneas, no es tenida en cuenta es cuando enfermamos geopáticamente. Así pues estos campos de radiación distorsionada son perjudiciales para todos los organismos vivos.
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