Información General | 17/10/2011 | 11:10:00
EXPEDIENTES SECRETOS
La Psíquica Alena Persaldi cree que el cambio planetario de 2012 ya llegó. Nota realizada por el periodista Sebastian Aranguren de Diario Popular (Bs.As.)
Otro mundo
Sin embargo, esa limpieza energética que busca erradicar las fuerzas oscuras afincadas en la tierra, “significará -enfatizó- un cambio dimensional que no será necesariamente el fin del mundo como algunos lo plantean”, aunque sí reconoció que se expresará “con ciudades que desaparecerán obligando a multitudinarias migraciones”. “La lógica de este cambio natural hará que haya muchos que sean ascendidos hacia la luz, para lo cual -remarcó la psíquica- habrá que entender que el concepto de muerte literalmente como lo conocemos desaparecerá porque la vida tendrá otros planos de continuidad que hoy pueden llegar a ser avizorados a partir de algunas manifestaciones paranormales”. En ese punto, la psíquica subrayó que “habrá muchos que serán ascendidos hacia la luz y eso también representará un forma concreta de vida, que en el actual concepto dimensional suena como algo difícil de comprender”. Sobre las fuerzas oscuras que han ganado espacio en las últimas centurias sobre la Tierra, Persaldi dijo que esas energías negativas “han impregnado el planeta y se consolidaron como expresiones dominantes capaces de generar tensiones, angustia, dolor, descontento y, por sobre todo, muerte. Convencida que el cambio dimensional hacia el cual el humanidad está orientada representa “una reacción a nivel universal despertada por la resultante de tanta carga oscura relacionada con la violencia, el enfrentamiento, la agresividad y el desvalor asignado a la vida humana”, Persaldi observó que son muchos los detalles que revelan que el planeta ya se encamina hacia la transformación energética. “A esta situación se le puede añadir lo que está ocurriendo con las bolsas internacionales y la pérdida de valor de las grandes divisas. Quien no dice que tras ese cambio dimensional que ya ha comenzado el mundo no tenga que acostumbrarse a vivir sin dinero”, sentenció. Por último, aseveró que “no hay que tenerle miedo a estos cambios porque en verdad implican otra forma de asumir la vida desde parámetros que hoy para nosotros son muy difíciles de entender pero que conviene ir aceptándolos porque, sin duda, ya empezaron a proyectarse”.
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